lunes, 30 de abril de 2012

COGIENDO OFICIO


COGIENDO OFICIO

Petronila. – A vos si sos ventajosa, no seas garosa, déjame alguito a mí también.
Vicky. – Umm, pero vos si sos bien antojada, no la podes ver a una disfrutarse es pero nada, apenas si le he pegado tres chupeteadas a este chimbombum que tengo entre la boca, y vos ya queres es pero echarle muela, y quítame pues esas garosas garras de encima, buitre, que no te voy es pero a dar, ¡nada, naita nada, naitaea!
Petronila. – Oila a esta tan grosera, alzándome la voz a mí, e ave María quien la viera así, y de repeso montañera aprende a callar cuando tienes la boca llena, o es que acaso, no te lo enseño muy bien el profesor Analberto, cuando te pillo puchando con uno de estos (chimbombunes) entre la jeta en clase, y si mal no recuerdo te puso en cuatro a repetir la tabla del ocho, no sé cuántas veces, pero eso si quedaste pipiola en eso de recitarla.
Vicky. – Sí, lo único malo es que para poderme acordar, y hacerlo con confianza siempre me toca arrodillármele al que me la pregunta.
Petronila. – ¡Que va!, eso es puro vicio que cogiste, porque a vos siempre te ha gustado eso, así como pelarle el culo a cualquier aparecido que te restriegue sus juguetes en la cara.
Vicky. –  ¡Hay sí que hablas mierda Petronila!
Petronila. – ¿Yo?, ¿mierda?, ¡ja!, no me hagas reír, sino acordate cuando conociste al Parmenido, no fue sino que te mostrara las llaves del carro, y vos ya estabas trepada en él, como vil perra gasolinera, te fuiste con la cabeza por fuera de la ventana, para que te diera el viento en la cara, y vaya una a saber si él otro por las tapas.
Vicky. –  Oíste esta tan atrevida, deja la cizaña pendeja, y mejor conseguite alguno que te quiera hacer el favor de sacarte a pasear, para que se te abra la entendedera, y de una vez que se te despejen las ideas, además deja de inventar que ese día que me fui con Parme, solo dimos una vuelta, y tomamos malteada de leche con caspiroletas.
Petronila. – Y ¿Qué más querías?
Vicky. –  No sé, una siempre espera más, yo sé que a la primera no entra uno bien en confianza siempre, pero quien sabe, no todos los días lo invitan a uno a comer salchichón con cuca.
Petronila. – Y a vos con lo que te gusta ¡el salchichón!
Vicky. –  Hay sí, con todo sabe rico.
Petronila. – Pues prefiero la salchicha, a mí eso tan grande no me cabe en la boca; aunque ¿vos no dijiste primero que habías era tomado malteada con caspiroletas?
Vicky. –  Hay sí, pero después se me olvido contarte que paramos en una tienda, porque Parme estaba hambriao, y pues a caballo regalado…
Petronila. – ¿Le echaste la muela, no?, ¡garosa!, que tan golosa que eres, de vos uno no se puede descuidar, porque si deja uno un huevo mal parqueado, te lo vas es pero zampando, ¿no?
Vicky. –  Ha vos sabes que boca llena, corazón contento.
Petronila. – Con razón vos la mantienes siempre llena.
Vicky. –  Ji, ji, ji, ¡Sí!
Petronila. – Y decime ¿cuál es el secreto para no ponerse una como una vaca hostler de tanto rumiar?
Vicky. –  Pues ¿adivina?
Petronila. – No me digas que te metes el dedo a cada rato, para vomitar.
Vicky. –  No gas, puerca, o ¿acaso tengo cara de prepago anoréxica?
Petronila. – Pues de anoréxica, no, pero de prepago, no sé.
Vicky. –  ¡Usshh!, ¿Cómo así?
Petronila. – Pues perdóname, pero yo soy una mujer decente, y no conozco a ninguna prepago para decirte.
Vicky. –  ¡Ja!, quien la oyera, ni que nunca hubieras visto noticias.
Petronila. – Pues la verda, la verda, no; porque mi abuelita dice que si quiero ver miserias, me vaya para un centro comercial en bus mochilero, y después me pare en un semáforo a vender dulces, para ver si cojo oficio.
Vicky. –  Ha ya, bueno, así pues ni modo, pero tiene razón tu abuela, ahí no ve uno sino cosas malas y malucas.
Petronila. – ¿En el noticiero o en el tour por la ciudad?
Vicky. –  En juntos los dos.
Petronila. – ¿Sabes qué?, mejor cojamos oficio, y acompáñame a donarle a alguien que la necesite toda esta ropa que ya no uso  y que tengo aquí en esta maleta.
Vicky. –  Con gusto amiga, pero acompáñame primero a mi casa que yo también quiero colaborar a la causa con unas tangas brasileras, y unos hilos dentales que ya no me pongo.
Petronila. – ¡Vos siempre tan caritativa!

FIN. 

Pd1. Disfrutar quiere decir también: no acumular por acumular.
Pd2. ¿Será que alguien le hizo también la obra de carida, a Petronila?
Pd3. Como dicen por ahí, “todo tiesto tiene su arepa”, así que no pierdan la esperanza, para que se le haga el milagrito.
Pd4. Y pues lo que no sirva que no estorbe, y lo que no se usa, que no se desperdicie, dar es darlo que uno no necesita, y lo que necesita también o algo así.

Att.

J.R.C.S.


POR FIN, UN PERRO DESEADO


POR FIN, UN PERRO DESEADO

ESTA ES LA HISTORIA DE UN PERRO, PORQUE SINO EL TITULO DIRIA EL GATO TAL O EL CHIGUIRO TATA, ETC.

Toda esta chimbada surge en una casa de gente pobre y arrancada como la yuca, estos pobres desgraciados de una ciudad cualquiera, vivían como podían, y no pienso decir más, ya es mucha miseria telenovelera, para sus pantallas mentales. Retomando, resulta que un día la muy callejera de su perra fufú se perdió por unos días, como acostumbraba a hacerlo para rebuscarse la comida, y cuando apareció, pues esta vez no llego sola, sino muy bien acompañada de algo más que las pulgas, era un paquete tan “lindo”, lindo mi culo dijo el jefe del hogar, porque la perra resulto bastante más vagabunda de lo que ya era, mejor dicho el tiempo que no estuvo en la casa, lo invirtió muy bien, haciendo de todo, o como dicen por ahí rameriando (creo que esta palabra no existe, pero ¿a quién coños le importa? Será que a los vejetes de la real academia de la mierda les compete, oh que triptongos ni que ocho mierdas) sigamos, ¿en qué íbamos?, ah sí, continuando con la historia, después de lo se demora una perra en parir o mejor dicho criar, se pueden imaginar el encarte de esa familia llevada del que los trajo a trabajar a una ciudad sabiendo que en el campo se vive mejor, bueno para no ser tan trágicos resulta que no fueron tan de malas, pues les salieron bonitos los campulgas marca chandoberman, así que como no podían desaprovechar la oportunidad, los vendieron todos a un restaurante chino, jajaja, no mentiras, que tal pobres bichitos,  lo que hicieron fue venderlos para ganarse unos pesitos; pasados ocho días, ya todos estaban vendidos, excepto uno, si ya se sabe que era de esperarse, ya que esto está inspirado en programas de la vida irreal, y aunque al chandoso lo ofrecieron hasta por un paquete de calaos u/o tostadas,  nada ni nadie lo quería comprar, es que ni reglado lo recibían, y no es que fuera feo el bendito animal, solo nació algo bizco. El tiempo seguía pasando, y nada de nada, no caía ningún pez en la red rota; entonces pasó lo de algunas veces, y cualquier plagio con películas de la TV es pura casualidad, porque cogieron al animalito, y lo echaron en una bolsa a la basura, la cual como es de esperarse llego al basurero, donde fue descargado el carro recolector que se lo había llevado, y apenas descargaron la basura el perrito salió rodando por un barranco, hasta caer en un montón, para variar de basura (recuerden que es un basurero), donde los recicladores que allí “trabajaban” (o sea recogen lo que pueden para sobrevivir, porque les toca), y de este grupo de gente un señor en particular (no sé cómo se llama, digamos el señor XX), encontró tan especial paquete, lo abrió, y oh sorpresa, salió nuestro perrito vivito y coleando, él sonrió de alegría y se lo llevo a su casa, donde aguardaba su pequeña hija, quien también sonrió llena de alegría al recibir tan hermoso regalo, al cual como se imaginaran, bautizaron Por Fin, y ahora si todos vivieron felices, bueno como podían entre tanta miseria, que mata mucha gente que tiene que hacer esto para sobrevivir a diario, ya que los gobiernos prefieren malgastar el dinero en guerras y armas, en lugar de educación, viviendas, salud y alimentos para todos.

Fin

Pd. Por Fin le ayudó mucho a esta familia, durante muchos años, hasta que murió de viejo, enseñándonos que todos podemos ayudar con lo que podemos, así sea cambiando nuestro modo de pensar y de actuar.
Pd2. No hay Pd2, jijijij

Att.

J.R.C.S.


miércoles, 11 de abril de 2012

CHIMBERTO Y SUS AMIGOS


CHIMBERTO Y SUS AMIGOS

Profesora. – Oigan bien pirobitos, porque por andar mariquiando por ahí no ponen cuidado al final de esta historia.
Chimberto. – Ah esta pajerosa si chimbea, acabe ya pues de una vez, que estamos es que nos vamos.
Profesora. – Paciencia Chimberto, paciencia; bueno y como les decía entonces Pirulo Jack, se había encontrado los frijoles saltarines mágicos de chupacoso sabroso del perpetuo socorro, dentro de un frasquito de vidrio, el cual tenía un letrero con letras grandes y pequeñas, pero como Pirulo Jack no sabía leer o le daba pereza (vaya uno a saber), además se le había acabado el mecato que llevaba, así que de un solo trancazo se engullo los tres frijoles, porque eran tres, y no cuatro, ni cinco, los cuales a pesar de ser tan pequeños en tamaño, eran ricos en proteínas y demás cacorradas alimenticias, fuera de ser deliciosos; y más tardo Pirulo Jack en zamparse su bocado, que los frijoles en empezar a germinar de una manera súper mega rápida hipercalifragilistica, mejor dicho a lo flash, y en 2 X 3 un gigantesco árbol brotó y se expandió dentro del estómago de Pirulo Jack, buscando crecer cada vez más y más, hasta que a fuerza de la presión, el culo le rompió, y por la boca misma también lo traspaso, dejando empalado al que al comienzo de esta historia se llamaba Pirulo Jack (R.I.P.) FIN.
Chimberto. – ¡Wauu, que chimba de final!, deberían hacer una película en 3D, y todas esas mierdas.
Profesora. – Bueno mis pirobitos, ¿Qué moraleja obtenemos de tan nutrida historia?
Porronio. – Que Pirulo Jack murió en su ley, con un tronco entre el c…
Profesora. – Bueno, no se diga más, que se nos vuelve cacofonía, dejen de repetir lo mismo del cuento. ¿Alguien nos puede decir algo que no sea repetición?, haber, haber.
Chuli. – Que Pirulo Jack recibió su merecido por arrojar desechos tóxicos al mar.
Profesora. – Umm, no está mal Chuli, y ¿Qué más podemos decir?
Pedricho. – Que Pirulo Jack murió por marica.
Profesora. – Eso es Pedricho, porque Pirulo Jack, no leyó la advertencia de las letras pequeñas del frasco que decía: Consumase con precaución, puede causar gases excesivos, indigestión, pesadez, diarrea, empalamiento, entre otros, en caso de emergencia consulte a su médico chaman más cercano o llame gratis al 018000309309123456789 – Gracias por su compra – Made in China –
Romchi. – ¿Entonces Pirulo Jack murió por muerto de hambre o por garoso?
Profesora. – No Romchita, por gula, y como ya habíamos dicho por marica también, o ¿acaso eres sorda?; bueno eso es todo por hoy, nos vemos mañana, no olviden traer un resumen de lo que se acuerden del cuento, y suerte es que les digo pirobitos, ¡los vi es que les digo!
      – Ya afuera del colegio –
Chimberto. – Ah la pajerosa esa sí que jode, ¿no muachos?
Porronio. – Sí, pero o es asistir a esta cacorrada para ser beneficiarios del suicidio-escolar o prostituirnos en la calle para levantar la comidita.
Chuli. – Ashh, usted sí que sabe decir las verdades en la jeta, ¿no Porronio?
Chimberto. – E ave María, a vos no se te puede decir la verda, porque en lugar de dar las gracias cuando te dicen puta, dices es a la orden, no, no, no.
Chuli. – Umm, deja la envidia que yo siempre te comparto y te doy de mi chicle, o acaso ¿de dónde crees que saco para estar comprando?
Chimberto. – Bueno, bueno, no vamos a pelear mamorsito linda, que vos sabes que a mí me gusta el pan remojado, para desayunar y comer.
Chimberto. – Pues sino fueras tan muerto de hambre, hace rato que ya hubieras terminado como Pirulo, con algo más que un dedo entre el roto del Caqui, aunque para mí eres campeón reservado, de trocha y galope.
Chimberto. – Ayy mamor tan linda, por eso es que te quiero tanto, mi jicatica del alma.
Chuli. – Bueno muachos, cambiando de tema, nos vemos luego, porque me invitaron a cine a ver una película del James Bond.
Romchi. – Y ¿cómo se llama la película?
Chuli. – Casi No Corono, o algo así.
Chimberto. – Yo oí que la coprotagonista es un travo Tailandés.
Romchi. – ¿De verdad?, ¡Ay marica!
Chimberto. – Pues ya te dije que oí, no se más porque no he visto la película esa, mejor que nos cuente Chuli que es la que la va a ver.
Chuli. – Bueno, yo les cuento, si puedo.
Chimberto. – ¡Claro!, quien sabe si pueda, porque es que uno en ese maniculiteteo tan bravo, que va a ver es pero nada de cine, va es pero a sentirlo, bien adentro, como en 4D.
Pedricho. – Ah déjala que ella sabe lo que hace, haya ella si resulta chupando piña y comiendo crema de leche.
Romchi. – Huy que rico, ¿en dónde venden de eso?
Chimberto. – Pues en la frutería de don Ernesto, si tanto te interesa saber, ¡garosa!

FIN

Pd1. ¿Será que Romchi se quedó con las ganas de empacarse su porción de fruta, donde don Ernesto?
Pd2. ¿Será que Chuli pudo ver la película, y contarles a sus amigos?
Pd3. ¿Será que la gente no deja de ver las repeticiones de la Potra Zaína?, ¡zoofilicos!
Pd4. ¿Será que esta historia tiene segunda parte?
Pd5. ¿Será que lo averigua Vargas? (ja,ja,ja)
Pd6. ¿Será que quieren más postdatas?
Pd7. ¿Será este el cuento con más postdatas que haya escrito nunca jamás?
Pd8. I don’t care, jejeje, los dejare es pero mamando.
Pd9.Wiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii


Att.
J.R.C.S.

LA CACHARRA NAVIDEÑA















Bueno aqui les traigo un cuento "retro" que escribi en 2006, enjoyyy

LA CACHARRA NAVIDEÑA

- ¡Huy Llego la Luz! , pero mírenla que sabrosura, esa si es una hembra deliciosa, y bien rica – dijo Fuf el zorro lechero –
- Umm si, esa si es una zorra – dijo Chuf el zorro repartidor –
- ¡No!, es toda una súper zorra, porque es como un kumis – expreso Fuf –
- ¿Qué?, ¿cómo qué? – replico Chuf –
- Como un kumis, porque está bien buena, y deliciosa, además para poseerla hay que tener plata. – explico Fuf –
- No, pues que comentario tan marica, mire a ver si de una vez se va pa’ la PM a venderle su cu…erpo a una agencia que se lo publicite, a ver si logra que alguien se lo compre, y mejor dejemos de hablar tanta damier, que nos vamos es a cagar esta chimba e cuento – Sugirió Chuf – el cual dice así:
“Y un, dos, y treinta y tres, y arre que ya llego, que ya llego, la Navidad, si, si, si, y Papá Noel viene y se nos viene, lalala la, sí que se nos viene encima, de los techos, para darnos todo su amor, lalala la, hay que prometedor suena, pero es navidad, lalala la, tiempo de dar, lo que todos necesitan, lalala la, amor, si hay que dar amor, y dar amor, para ahogar el sopor, lalala la, ¡sí!, ya todos sienten el calor de la máquina del amor, lalala la, nananana…” (Las comillas son para expresar que es una tonada navideña que suena por los alrededores, y por amor me refiero al real, no al sexo cochino contra la nevera; ummm nevera).
Y Sin Cambiarnos de escena, nos vamos al mismo lugar, donde unas hembritas que charlando están, comentan lo siguiente:
- Ay Zorrina mira esa cosa tan grande que Papá Noel tiene ahí debajo.
- Presta Zorruna esos binoculares, déjame ver, umm si, está bien grande, vamos a ver si él necesita una manito.
- Si, vamos a ayudarlo.
- Hola Papá Noel – saludaron las zorras, ya que nunca se dijo que fueran humanas –
- Hola mis zorritas del bosque de la puta mierda, jojojo, ¿cómo les baila últimamente? – Saludo Papá Noel -
- Bien, bien, y ya dejándonos de mariconadas, cuéntanos, ¿qué es lo que tienes ahí debajo? – dijo Zorruna alborotada por la curiosidad -
- Ah ustedes si son bien metidas, les pica si no les muestro, par de picaras, jojojo; si tanto quieren saber, ¡pues miren! – les mostro Papá Noel -
- Ahhh, ohh, uyyy!!!, ¿qué es todo eso Papá Noel? – Dijeron las zorritas con cara de contentas -
- No, pues un regalito que me dio la madre naturaleza. – Informo Papá Noel chicaneando -
- Huy, pero dios mío, ¡qué grande! – Dijeron las zorritas con cara de sorpresa -
- ¡Sí!, jojojo. – Afirmo Papá Noel jactancioso -
- Y ¿lo podemos tocar? – Dijeron las zorritas con cara de alevosía -
- Sí, claro, adelante mis niñas. – Dijo Papá Noel sonriendo -
- ¡Urra!, a ver, umm, está muy duro, esta duro como el acero, y ¿lo podemos montar? – Dijeron las zorritas con exaltación -
- Adelante, bien puedan. – Dijo Papá Noel asintiendo -
- ¡Urra, urra!, oh que rico – dijo Zorrina -
- Oye bájate, que yo también quiero probar – dijo Zorruna -
- Bueno, bueno, no peleen que hay para las dos, pero solo una a la vez, ya que no se pueden montar dos al tiempo en él – informo Papá Noel -
- Ok Papá Noel; y bueno tengo al algo que decirte, creo que él ya debe estar por venir, me impacienta, pero creo que ya viene, si ya viene, ohh, ya está aquí, ohh, hola Rodolfo. – expreso Zorruna -
- Hola todos, ¿cómo están? – Saludo Rodolfo-
- Llegando tarde, ¿no? mijito, jojojo, ya es hora pero de irnos a pegar una vueltica por ahí, jojojo, bájese pues Zorruna y quédese con su hermana jugando así bien rico, mientras regreso y las dejo montar otro ratico en mi juguete, jojojo, y usted Rodolfo, péguese de esta cacharra, y enchúfese este cable que le voy a dar es pero juete, jojojo, arre pues jueperra que nos cogió, la noche, jojojo, para irnos a repartir unos regalitos, para que vayamos practicando, jojojo, para que el 24 no nos toque tan duro, y salgamos temprano, jojojo, para que nos podamos ir donde la vieja pucha, la mamá de este par de hermosas zorras, que tan gentilmente nos ha invitado a tomar chicha e maíz y guarapo de cascara de piña, en su humilde madriguera, jojojo – dijo Papá Noel compresivo y efusivo -
- ¿La casa de los bombillitos rojos? – Pregunto Rodolfo-
- Si, esa misma, jojojo, y bueno prendamos esta coscorria, a ver si algún día acabamos, jojojo, y bueno mis niñas, por ultimas vez, jojojo, sé que están muy amañadas, y todo eso, jojojo, pero ya es hora que se bajen de mi cacharra, y suerte es que les digo, jojojo – respondió Papá Noel -

Fin.

Pd. Que chimba parcheros, tanto esperar, para que sepan que a cada marrano le llega su noche buena. Así que no se afanen, que cuando menos se den cuanta, taque que ahí les llega.
Pd2. Las zorritas, esperaron pacientes la llegada de Papá Noel, quien las monto toda noche (en su cacharra), hasta que su mamá las llamo para que le ayudaran a hacer unos tamales, pero ellas todas trasnochadas como estaban de tanto montar en la cacharra de Papá Noel, tuvieron que descansar toda la mañana, y tomarse un caldo levanta muertos, y así por la tarde pudieron emprender sus labores cotidianas.
Pd3. Que historia más, vamos castores vamos, vamos a belén, a verle a ese niño la gloria del...
Pd4. Entiéndase por cacharra lo que por otras latitudes llaman trineo, en el cual Papá Noel, reparte sus, jojojo. Merry Xmasssss!!!

Att.
J.R.C.S.