CHISMOSEANDO EN LA CALLE
Firula – Hay hola Lola
querida, ¿qué más?, ¿cómo has estado?
Lola – Bien, y ¿tu Firula?,
tiempo sin verte.
Firula – ¡Cierto!, hace la
de días que no te veía.
Lola – Sí, días pero días de
los días.
Firula – Huy pero si te vez
súper cambiada, ¿Qué te hiciste?, contame pues, no me dejes en ascuas.
Lola – ¿Yo?, ¡nada!, vos estas es como mal de las
vistas.
Firula – ¡No mijita!, podre
estar coja, adolorida y recién culiada y borracha, como estoy, pero eso sí de la
vista, no me podes decir nada, porque esa nunca me falla; pero déjame decirte
algo, que estas cambiada, lo estás, este olfato de perro gozque que tengo para
estas cosas, nunca me falla, déjame haber te analizo, ummm.
Lola – Pues no creo que me
podas ver nada nuevo, porque estos chiros que llevo puesto, los tengo hace
días, y vos misma fuiste quien me acompaño a comprarlos en el rebajon del
agáchese que hubo hace como quince días en el centro.
Firula – ¡Vah!, eso no es
querida, ¡hay ya se!, y por la virgen del agarradero haceme el favor y júrame,
júrame, que no estas embarazada, porque lo que tenes es pura cara de preñada, y
pa’ darme cuenta de eso, te puedo decir que si tengo muy buen ojo, así como le
dije a mi comadre Filomena cuando le empacaron los trillizos y no llevaba ni media
hora de haberlos concebido, y para mí lo que vos tenes es el buche lleno de
huesos.
Lola – Que, ¿qué?
Firula – Si como oíste, que
tenes el paquetico de papas premiado, y con el muñequito adentro.
Lola – ¡No!, no me digas eso
querida, no me asustes, que no me acuerdo a qué horas me hicieron el favor,
porque no me di ni cuenta quien es el padre.
Firula – Bueno, bueno,
primero cálmate mijita, y analicemos la situación con cabeza fría, que de las
arrecheras no queda sino el cansancio, la cara de satisfacción y las ganas de más,
(umm más).
Lola – Y ¿vos que queres
saber, pues?
Firula – Pues todo lo
concerniente al asunto, así descartamos todas las posibilidades, y nos quitamos
las dudas de encima, sobre esto y aquello.
Lola – Ok querida,
pregúntame entonces lo que queras, que vos bien sabes que para ti soy un libro
abierto dispuesto a ser leído, y releído si es necesario.
Firula – Bueno decime ¿hace cuánto
o mejor dicho cuándo fue la última vez que le estuviste dando al negocio?
Lola – Haber, déjame pensar
que no recuerdo bien porque eso fue hace tantos días, que hasta ya se me olvido
la cara del santo que me hizo el milagro, de encenderme con su velita.
Firula – Jummm, pero no te
creo que haya sido hace tanto rato querida, deja de pendejear y echa cabeza,
para que podamos hacer las cuentas.
Lola – Pues creo que eso fue
hace como ocho días, sino es que más.
Firula – ¡Tanto!, ¡no lo
puedo creer!, con razón y ya ni te acordabas, en cambio yo si mantengo al día
con eso, con decirte que me eche unos cuantos polvitos antes de venirme, para acá.
Lola – Sí, se te notan en la
cara, y decime ¿Qué marca son?
Firula – Pues Vogue, que
Vogue, querida, vos sabes que el Humberto, no me da puntada sin dedal, ni clavo
sin su martillo, pero sigamos pues con lo tuyo, sigamos, que luego se nos
olvida por estar chismoseando.
Lola – Listo pues, seguime
preguntando.
Firula – Pero decime, ¿ya te
hiciste la prueba de embarazo?, porque esa es la que la saca a una de dudas.
Lola – ¡Pues no pendeja!, si
me acabo de enterar por parte tuya; pero y si sale positiva, ¿Qué hago?
Firula – Pues gózatela
querida, gózatela.
Lola – Como así, explícate.
Firula – Pues ¿te acuerdas
cuando estuve en embarazo de Pipe, Remualdo, José, Rene y Ramiro?
Lola – Pues claro si eso fue
hace poquito, si yo te ayude a cuidarte de la dieta, y apenas te recuperaste te
fuiste para Santa Martha, y me trajiste unas chanclas pal estrene de navidad;
pero y eso ¿qué tiene que ver con esto?
Firula – Pues todo querida,
todo, porque cuando una está embarazada es cuando una más debe aprovechar, pa’
pichar como burro en primavera, sin inhibiciones y a calzón quitao, y que le
llenen a una el vaso de leche, y le den bocadillo antes de irse a acostar,
porque por más litros que le entren a una, ya nada puede pasar, además una no
se engorda de tanto tragar durante la preñes, y según los dotores de la tv, eso
ayuda a la estimulación temprana.
Lola – Y ¿eso qué es?
Firula – Pues no estoy
segura, pero de algo habrá de servir, si no mire como quede de mami rica
después de tanto gozar.
Lola – Pues si es así, ya
mismito me voy a empezar a estimularlo con el Ignacio que ahí viene, y sabes
que, chaito es que te digo querida, muah, muah.
Firula – Chaito, pues que te
lo disfrutes, y luego me cuentas, muah, muah.
(Garosa la muchacha, ¿no?)
Fin.
Pd1. El que la goza la goza,
y el que la sufre la sufre.
Pd2. Pues a gozar les digo,
no sea que les toque sufrirla, jejeje
Pd3. Lola se hizo la prueba
de embarazo, y le salió negativa, pero igual se la gozo.
Pd4. No hay pd4. Lero, lero…
Att.
J.R.C.S.