VERANEANDO
Dora Alicia – Ahí le dejo el
condón que me presto encima de la cama, y que gracias, mamita.
Marixa – De nada amiga, y
cuéntame ¿Cómo te fue?
Dora Alicia – Hay más bien
mami, como será que todavía estoy mamada de darlo, es que si ese man hubiera podido
me hubiera dado hasta por las orejas.
Marixa – ¡Huy que rico!, no
me hagas antojar que con este ver-ano, se me sube más la calentura, y desde
anoche nada de nada con nada con nadie, ni con el simón que quedo de venir, y
así no aguanta marica.
Dora Alicia – Ashh vos si
sos bien culi arrecha, no podes vivir sin que te lo metan.
Marixa – Jumm, deja la
envidia, que si bien vos sabes que si una tiene necesidades y puede
satisfacerlas, lo mejor es darles rienda suelta, porque no hay nada más rico
que cabalgar, y que la cabalguen a una como potra salvaje, y a pelo, como es
debido.
Dora Alicia – Pues si te creo, como decía mi abuela, unas
nacen pa’ zungas y otras nacen pa’ putas o algo así.
Marixa – Pues muy sabia tu
abuela que bien puta que si era, y la pasaba bien bueno con tanto puto que la
quería y la ensartaba por doquier.
Dora Alicia - ¿La pasaba?,
déjame informarte que mi abuela, debe estar por ahí dándole al negocio, porque
esta mañana se fue con el renacuajo pichador, muy tiesa y muy maja, y como bien
dice ella, arrecha desde la cuna hasta la tumba, porque lo que no se usa se
oxida o se atrofia.
Marixa – Mejor no lo podías
haber dicho querida, pero espérate tantico tengo que hacer una llamada antes de
seguir chismoseando, porque tanto hablar de viandas me ha abierto el apetito.
Dora Alicia – Dale, dale,
tranquila.
Marixa – Gracias. Pi, pi,
pi, pi, pi, pi – Aló, si aló, hay simón papito, ¿Cómo estás?, ¿si me has
pensado alguito?, hay que rico, ummm, ¡si!, ¡si!, no mejor venite es pero ¡ya!, de
por allá que con todo eso que me has dicho me has puesto, ¡a tono!, te espero,
muahhhhhh
Dora Alicia – Y ¿Qué te dijo
el simón?
Marixa – Que ya mismito se
viene para acá, que me aliste porque de esta no me salvo, que está más
enfierrao que traqueto en desfile de ferias, y que la tiene pa’ partir panela.
Dora Alicia - ¡Uyyy!, que
rico marica, y vos que no convidas.
Marixa – Si no estuviera tan necesitada como sabes que estoy, con gusto tijereteábamos un rato, y luego haríamos un Ménage à trois.
Marixa – Si no estuviera tan necesitada como sabes que estoy, con gusto tijereteábamos un rato, y luego haríamos un Ménage à trois.
Dora Alicia - Hay tan linda, vos siempre tan querida, mejor
ándate y lávate bien ese negocio, que en cualquier momento te llega el pedido
de bochín a domicilio, así que chao amigis, ¡que la pases bien rico!
Marixa – ¡Hay marica tenes
razón!, sabes que nos olemos lueguito, te cuidas, muah, muah. – Hay ¿dónde deje
la toalla?
Fin.
Pd1. ¿Será que Marixa pudo
encontrar la toalla?
PD2. La respuesta a la Pd1
es: Por su pollo que No, porque el simón se la cogió bañando, y etc…
Pd3. Dora Alicia, tampoco se
quedó con las ganas, y se fue a chupar, helado con un amigo que se encontró por
el camino cuando salía de la casa de Marixa, y le dieron al tiqui, y al taque, y
al tralalala.
Pd4. Este cuento está
dedicado a la libertad de expresión, di no a la censura literaria, ¡joder!
PD5. Al que le gusto, le gusto,
y al que no pues etc…
Att.
J.R.C.S.